“Si no se frena la concentración yerbatera, la responsabilidad política será de la Renovación”

Bárbaro consideró que el Proyecto debe socializarse, y conocerse para evitar posiciones sesgadas en relación a la innovadora propuesta, especialmente en un año marcado por la coyuntura electoral. "El proceso de concentración del mercado yerbatero se profundizó en los últimos años y hay que frenarlo, porque más allá de la coyuntura de precios o excedentes de materia prima, la concentración es lo único de lo que no se puede volver, es irreversible. El oficialismo renovador tiene la responsabilidad política de tomar las riendas. Si no recuperamos la autonomía en el manejo de nuestra yerba, el pequeño productor y los pequeños secaderos y cooperativas están condenados a desaparecer", señaló. Según el legislador, en esta instancia de la realidad "no se puede seguir culpando a la desregulación de los 90, porque el INYM existe desde hace 15 años, y sólo benefició a las grandes industrias correntinas que se llevan nuestra materia prima, pagan dos pesos, concentran la actividad y manejan el mercado", disparó el diputado. El Gobierno de Misiones debe recuperar la autonomía provincial En esta línea, consideró que el INYM "nunca fue y ya no puede ser considerado una herramienta del productor misionero. A esta altura, esa posición es infantil o fantasiosa, porque ya intentamos todas las alternativas para corregir el desequilibrio interno en la toma de decisiones, y se fracasó siempre". De allí que "tomar las riendas del tema y recuperar la autonomía provincial en las decisiones es un gesto de responsabilidad del Gobierno misionero que esperan todos los productores que se están fundiendo. En Misiones son el 70%; y los tareferos que componen miles de familias, los pequeños secaderos y cooperativas, ven que nadie hace nada para ayudarlos en serio, que los dejan tirados en los cortes de ruta y que las tomas al INYM no sirvieron para nada. Están esperando posiciones firmes para sacarlos de la tiranía de las reglas del mercado, que como sabemos, no permite la existencia del minifundio. Esta concentración es un claro signo neoliberal funcional al actual Gobierno Nacional y a su ideología, muy consecuente con la pérdida de nuestra autonomía provincial y con el federalismo de la boca para afuera", disparó. Bárbaro consideró que el Centro Misionero de Acopio, Comercialización y Promoción de la Yerba Mate, "realmente corrigirá esta coyuntura. Incluso permitiría establecer el precio en 50 centavos de dólar como propuso el oficialismo, porque al ser una sociedad del Estado, podrá tomar las decisiones que crea necesarias". Finalmente agregó, e invitó a todos los sectores políticos y productivos a enriquecer la iniciativa para lograr que sea "lo mejor que construyamos colectivamente en los últimos tiempos para recuperar nuestra yerba". ¿Qué es el CeMACoP? El Centro Misionero de Acopio, Comercialización y Promoción de la Yerba Mate traduce el esperado "Mercado Consignatario", que tanto reclama el sector productivo yerbatero, y que nunca se puso en marcha por parte del INYM pese a estar creado por Ley Nacional desde 2009. La propuesta de Bárbaro le da alcances exclusivamente misioneros, sin injerencias nacionales. Propone comprar y acopiar, en el arranque, unos 16,6 millones de kilos de canchada en el primer año, equivalentes a 50 millones de kilos de hoja verde, para lo cual necesitaría la suma de 360 millones de pesos. Los directos beneficiarios en esta primera etapa serían 2000 productores (o más) efectivamente blanqueados e inscriptos en el INYM, con unidades productivas menores a cinco hectáreas o con cosechas menores a los 25 mil kilos. Acopiaría la materia prima en los galpones de la ex Comisión Nacional de Regulación de la Yerba Mate (Crym) transferidos a la provincia por Ley Nacional 24945/98 y ubicados en la localidad de Santa Ana. Para su financiamiento, además de los aportes provinciales que eventualmente se dispongan, se pensó en una Tasa por Servicios Yerbateros de 0,33 centavos por kilo de yerba mate en hoja verde, y de 0,99 centavos por kilo de yerba mate canchada, cuyo pago será obligatorio por dos años, prorrogables por un período similar, y con una bonificación especial del 100% en la alícuota para los contribuyentes cuyos establecimientos de secanza o plantas procesadoras se encuentren dentro de Misiones. En la práctica, pagarían esta tasa quienes se lleven la materia prima fuera de la provincia para su elaboración. Manejar el stock para equilibrar la oferta y sostener el precio Según la propuesta, los secaderos y cooperativas que prestan servicios de secanza deberán notificar el listado de productores y la cantidad de hoja verde adquirida a cada uno, en carácter de declaración jurada. El productor, a su vez, informará quién le realizó el servicio de cosecha, e identificará a todos los tareferos que participaron. El Centro depositará en las cuentas bancarias de cada productor el monto correspondiente por los kilos entregados, menos corresponsabilidad y pago a tareferos. Además depositará a cada tarefero el pago bancarizado correspondiente según paritarias, y de acuerdo a la declaración jurada sobre kilos cosechados. El productor convendrá y abonará el precio correspondiente al flete, y podrá optar por cobrar el valor según los kilos de hoja verde entregados al secadero, o dejar en depósito los kilos equivalentes de yerba cachada para su estacionamiento y posterior comercialización. A su vez, el CeMACoP manejará ese stock para equilibrar la oferta y sostener el precio, y podrá incluso crear su marca propia para competir en el mercado nacional.