SALUD | Internacionales | 09/07/2019
Las ETS constituyen una epidemia tan silenciosa como peligrosa. Se estima que cada día, miles de personas adquieren gonorrea, sífilis, clamidia, entre otras. Las consecuencias de estas enfermedades pueden ser graves si no son tratadas. 

Las enfermedades sexualmente transmisibles, gonorrea, sífilis, clamidia y tricomoniasis, son una epidemia “silenciosa” a la vez que “peligrosa”, con un millón de nuevos casos cada día en el mundo y una de cada veinticinco personas infectadas con al menos una de ellas, alerta la Organización Mundial de la Salud (OMS). 


La entidad presentó un balance como resultado de una recogida y análisis de datos que se centran en personas entre 15 y 49 años en todas las regiones del mundo, ninguna de las cuales muestra una disminución de estas enfermedades de graves consecuencias si no son curadas.


Una de las dificultades para ello es que una gran parte de los 376 millones de infectados ignoran que lo están por la ausencia de síntomas o porque estos son leves, lo que no impide que transmitan esas enfermedades a sus parejas sexuales. Otro aspecto que juega en contra del diagnóstico de estas enfermedades es la vergüenza y el estigma que siguen generando.


“Las enfermedades transmisibles sexualmente (ETS) están en todos los sitios y son más comunes de lo que pensamos, pero no reciben la suficiente atención y se sigue estigmatizando a la gente que las sufre”, dijo la experta del Departamento de Salud Reproductiva de la OMS, Teodora Wi y agregó: “Necesitamos hablar abierta y honestamente de las ETS y no ponerlas bajo la alfombra y pretender que no existen”.


Propagación sin freno


“Estamos preocupados por el poco progreso que se ha hecho para detener la propagación”, destacó Peter Salama, director ejecutivo del programa de Cobertura Universal en Salud de la OMS, coincidiendo con la presentación del estudio Clamidia, gonorrea, tricomoniasis y sífilis: estimaciones de prevalencia e incidencia global. Y apuntó: “Esta es una llamada de atención para un esfuerzo concertado que busca asegurar que todos, en cualquier lugar, puedan acceder a los servicios que necesitan para prevenir y tratar estas enfermedades”.


Según los datos difundidos por la OMS y publicados por agencias de noticias internacionales, sólo la sífilis causó aproximadamente unas 200.000 muertes fetales y de recién nacidos en 2016, el último año para el que hay datos actualizados al momento, lo que la convierte en una de las principales causas de pérdida de bebés a nivel mundial, según la investigación.


Comparado con su último análisis previo, que data de 2012, la OMS reportó que no encontró “una reducción importante” en las tasas de las infecciones nuevas o los casos ya existentes.


Los datos


La organización sugiere que una de cada 25 personas tiene al menos una de las ETS. Y algunas de ellas, varias al mismo tiempo. En tanto, las cifras sugieren que en personas de entre 15 y 49 años se registran:

l 156 millones de casos nuevos de tricomoniasis.

l 127 millones de casos nuevos de clamidia.

l 87 millones de casos nuevos de gonorrea.

l 6,3 millones de casos nuevos de sífilis.


La tricomoniasis es una infección causada por un parásito que se transmite mediante las relaciones sexuales. La clamidia, sífilis, gonorrea son infecciones bacterianas.


Los síntomas de las ETS pueden incluir dolor al orinar, sangrado entre períodos menstruales y secreciones en las zonas genitales. Sin embargo, en muchos casos no se presenta ningún síntoma. Pero no atender la infección puede llevar a complicaciones mayores, tales como inflamación de la zona pélvica, infertilidad en la mujer por causa de la clamidia y la gonorrea, y enfermedades cardiovasculares y neurológicas por la sífilis.


Las recomendaciones


Las recomendaciones de la OMS sobre este tema son tener relaciones sexuales seguras, especialmente mediante el uso de condón, así como mejorar las condiciones para el acceso al diagnóstico.


En cuestiones de tratamiento, según publica BBC, la OMS recuerda que las ETS pueden ser curadas con una amplia gama de medicamentos. Sin embargo, actualmente el tratamiento para la sífilis se ha hecho más dificultoso debido a la escasez de una clase especial de penicilina.


A esto se suma que se ha notado un incremento de casos de la llamada “supergonorrea”, que es imposible de tratar con las drogas existentes.


“Los casos de gonorrea intratables son precursores de una crisis más amplia, donde las infecciones comunes son cada vez más difíciles de tratar”, dijo a la agencia británica BBC el médico Tim Jinks, jefe del programa de Infecciones Resistentes a las Drogas de la fundación británica Wellcome. “Necesitamos urgentemente reducir la propagación de estas infecciones e invertir en nuevos antibióticos y tratamientos para reemplazar los que ya no funcionan”, añadió.