El humo provocado por los gigantescos incendios que afectan
a la Amazonía en Brasil y Bolivia no solo ha oscurecido a Sao Paulo, a cientos
de kilómetros de distancia de las llamas. Este miércoles (21.08.2019) las
autoridades peruanas informaron que una "capa fina de humo” apareció en
los cielos de la provincia amazónica de Tambopata "por efecto del aire que
llega desde Brasil y Bolivia”, según el Centro de Operaciones de Emergencia
Regional de la región de Madre de Dios.
Por ahora el fenómeno es percibido por la población como un
olor "aún no potente”, por lo que de momento no se han tomado medidas de
emergencia, aunque la calidad del aire es vigilada por el Servicio Nacional de
Meteorología e Hidrología (Senamhi) y otras instituciones competentes. De
acuerdo con diversos reportes, la magnitud de los siniestros que afecta a la
selva amazónica es histórica.
Aunque no hay todavía un reporte oficial sobre cuánta
superficie ha resultado dañada, se estima que son miles las hectáreas
consumidas por el fuego en los estados brasileños de Rondonia, Mato Grosso y
Mato Grosso del Sur, y en el departamento boliviano de Santa Cruz. El gobierno
de Brasil atribuye los focos a una sequía fuera de lo común e incluso el
presidente Jair Bolsonaro acusó de la catástrofe a las ONG.
En Ecuador, en tanto, diversos colectivos ambientalistas
convocaron a manifestaciones para exigir que el gobierno brasileño haga algo
para detener la expansión del fuego. "La Amazonía está en llamas y
exigimos a los gobiernos que tomen medidas urgentes”, señala el mensaje en las
redes sociales que ha circulado en Ecuador y que se difunde con el nombre de
#EmergenciaClimática.
Los grupos ambientalistas aseguran que la catástrofe comenzó
por la quema de bosques para liberar espacio para uso ganadero o explotación
minera. Entre enero y el 19 de agosto se han registrado 72.843 focos de
incendios forestales en Brasil, un 83 por ciento más que en el mismo período
del año pasado, según el Programa de Quemas del Instituto Nacional de
Investigaciones Espaciales (INPE).
A juicio de numerosos analistas, el actual descontrol se
debe al fuerte aumento de la deforestación, que en 2019 se multiplicó por
cuatro en comparación con 2018. Bolivia, por su parte, anunció que alquilará un
avión cisterna SuperTanker para aplacar el incendio que afecta a la reserva de
Tucavaca, en la Amazonía boliviana, donde se ha dañado la flora y fauna de más
de medio millón de hectáreas.