El oficial de apellido Vergara habría sido quien ejecutó el
disparo mortal que le atravesó un ojo y salió por la cabeza al joven Víctor
Márquez Dos Santos (16).
Eliana, hermana del muchacho asesinado hace unos días en
Santa Ana, contó una insólita situación que les tocó vivir. Más bien que
recordaron una vez que se supo que el homicida de su hermano podía ser un policía.
“Nunca sospechamos de nadie. Sabíamos que el arma era una 9
milímetros y que si bien se puede conseguir en el marcado negro, era difícil
que cualquiera la tuviera. Además este oficial que están diciendo que pudo ser
fue hasta el velorio y le dijo a una de mis hermanas que se quede tranquila que
todo se iba a aclarar”, agregó la joven en contacto con Radio Libertad.
“No conocemos al policía. Parece que es de Candelaria pero tenía una novia en Santa Ana. La compañera que lo apuntó sí es de acá. Lo que nos importa es que pague las dos vidas que se llevó”, indicó.
Esto último en referencia a que además del muchachito muerto
a sangre fría prácticamente, falleció el padre por no poder soportar el dolor
de ver a su hijo menor terminar de esa manera, con un balazo en la cabeza.
También la joven habló que varios testigos o personas del
barrio ya conocían el accionar del uniformado apuntado y que en reiteradas
oportunidades les había apuntado con el arma a los jóvenes del barrio.
“Ya pusimos un abogado para presentarnos como querellantes.
Queremos que él pague por lo que hizo. Que le den la pena máxima por llevarse
las dos vidas y encima también arruinar la vida de su familia”.
Por último pidió que los policías que estaban con el
presunto homicida también paguen con el grado de responsabilidad que tuvieron
al no frenar ese accionar. “No entendemos porqué lo hizo. Mi hermano era un
chico bueno, sano, no tomaba ni andaba en nada raro. Nosotros estamos pensando
en que vio algo que no tenia que ver”.