En el inicio Racing logró hacerse del control del balón, característico en el equipo de Fernando Gago, con Miranda y Moreno dominando la mitad de la cancha, mientras que Boca ofreció la dupla entre "Pol" Fernández y Varela.
Un cabezazo de Rojas y un remate de Chancalay, ambos desviado por la izquierda de Rossi, fueron las más claras de la "Academia" que fue veloz para la recuperación del balón, frente a un Boca que pasó varios minutos de desconcierto.
La zurda de Rojas y el duelo entre Rojo y Copetti fueron los condimentos más salientes de un partido en el que Boca nunca pudo encontrar su mejor ritmo y las llegadas al área de "Chila" Gómez brillaron por su ausencia.
Es que el circuito de juego de Boca tuvo muchos cortocircuitos y Benedetto debió bajar mucho a buscar el balón, y por eso el ataque boquense fue casi nulo.
Racing perdió a Rojas, uno de sus mejores hombres, y en su lugar ingresó Correa, que en su primera intervención cabeceó cerca de un palo ante una mala salida de Rossi.
Para la segunda parte las cosas estuvieron algo más parejas en los primeros minutos, pero luego Racing volvió a ser dueño del balón, con una buena distribución y siempre buscando abrir por los laterales.
Demasiado comprimido todo, con excesivas imprecisiones sin que ninguno de los dos pudiera tener chances claras, el partido fue transitando por lugares muy aburridos y hasta inciertos.
Boca nunca tuvo ningún problema en revolear el balón lejos de su arco, mientras que Racing buscó con pelotazos a las espaldas de los mediocampistas y casi lo tuvo Alcaraz de cabeza.
El partido entró en una zona en donde el que erraba algún detalle podía pagarlo caro y por eso las imperfecciones y los errores de los protagonistas hicieron que el juego fuera flojo y previsible, además de mal disputado.
Luego todo se definió en los remates desde el punto del penal en los cuales Boca tuvo a Rossi y a la fortuna de su lado, mientras que Racing perdió por detalles que le costaron caro.