En ese sentido, aseguró que el sector político y económico está expectante por el impacto que genera la situación del dólar en el poder de compra de los argentinos,  también la distorsión que genera para los insumos importados del sector industrial y el agro arrastrando  su impacto en la inflación.

"Por más que uno tenga los aumentos salariales y las paritarias, el proceso inflacionario afecta igual a los bolsillos. Ha pasado en todos estos años y más ahora que aún no se vio el impacto en serio de la emisión monetaria de este Gobierno", recalcó. 

Robles opinó que el Estado intervino de varias formas para que la divisa logre bajar en estos últimos días. “Estas injerencias se dieron en el mercado del dólar financiero, por medio de la compraventa de títulos públicos; en la participación en el mercado del dólar futuro, principalmente en el ROFEX, con posturas vendedoras en posiciones cortas; la colocación de títulos públicos ajustables, particularmente al tipo de cambio oficial; un mayor control de operaciones de cambio; y las reversión de algunas restricciones a la operatoria, con la eliminación del parking en la venta de activos con liquidación en pesos; además de la autorización de participación de no residentes  en el mercado. 

El economista agregó que "la gente invierte en pesos, pero recibe al dólar del tipo de cambio al momento en que lo liquida. Al respecto, explicó que "personalmente no apostaría a activos en  peso, pero sí en activos dólarizados que sean  líquidos y que se encuentren fuera del riesgo argentino”. 

Robles criticó al Gobierno nacional, sobre todo al ministro de Economía, quien "solo está poniendo parches para que todos los tipos de dólares bajen y estén cerca del piso del dólar solidario que ronda los 140 pesos". 

Luego, el empresario subrayó que hay problemas estructurales en el país que vienen desde la gestión de Mauricio Macri con el déficit fiscal y la inflación galopante. "El país debe ser creíble para que las cosas cambien, luego viene todo el resto", insistió.

Sobre esa observación, detalló que "hoy en día todas las compañías se quieren ir de acá. Ha pasado ya con varias empresas que se han mudado. No hay rentabilidad, ni confianza, no somos atractivos para los inversores. Si ellos vienen, llega la liquidez y las inversiones y los bancos empiezan a ofrecer un financiamiento genuino a largo plazo. Así se genera cierta estabilidad y se puede combatir la inflación".

Agregó que "aumentar el gasto público no es una solución, solo es un parche. En el corto plazo el Gobierno no demuestra nada que pueda dar garantías. Mientras acá pasamos por esto, en Paraguay hay excesos de dólares. Todo pasa por la credibilidad de este Gobierno, la cual es baja".