Los policías recorrían preventivamente el vecindario cuando avistaron al joven en actitud sospechosa que llevaba consigo un matafuego, una llave de cruz y un gato para levantar autos. En ese instante, cuando este se vio sorprendido por los uniformados, intentó darse a la fuga arrojando los elementos al suelo, pero fue interceptado a los pocos metros.
Allí procedieron a identificarlo y como este no supo justificar la procedencia de los objetos, fue trasladado a sede policial donde minutos después, se presentó el dueño afirmando que eran suyos.
Por tal motivo, el joven fue alojado a disposición de la Justicia en tanto que las herramientas se restituyeron al damnificado luego de los trámites de rigor.