Pidieron algo sencillo: unos panchos, unas empanadas, sandwiches de miga y algo para tomar. Sin embargo, se quedaron sin aliento cuando recibieron el ticket: al leer la cuenta, se encontraron con que cada pancho costaba $772, es decir, que por dos terminaron pagando $1.444.
"Era un localcito chiquito, con algunas mesitas en donde la gente se sienta a comer algo. Se sabe que hay que andar mucho y que se necesita tomar un refresco o comer algo para mantenerse", dijo la protagonista, oriunda de La Plata, a El Día.
La mujer, quien se animó a hablar de "precios robados", expresó que "ni siquiera eran superpanchos, sino que eran comunes".
"La salchicha, el pan y una línea de mayonesa y otra de ketchup. No es que tenía papas fritas ni nada adicional", agregó.
Pero eso no fue todo: por dos empanadas, tuvieron que pagar $444, es decir que el costo de cada una era de $222.
Lo más barato que consiguieron fue una promoción de cuatro sandwiches de miga de jamón y queso y una gaseosa de 500 a $1.333.
"Mi nieto de 15 años miró y se dio cuenta de que estaban cobrando muy caro. El problema es que se aprovechan de la gente", expresó la mujer, quien contó que "había un matrimonio que preguntó por dos empanadas y le pasaron 500 pesos".
"El chico que estaba con ellos pegó el grito y se fueron", añadió.
Disgustada por los precios de la comida en el Parque Iguazú, se lamentó porque "se aprovechan de los turistas".
