SALUD | Nacionales | 25/08/2022
Lo llaman “el marcapasos más pequeño del mundo”. Es del tamaño de una píldora de vitaminas: mide solo 2,6 centímetros y se usó por primera vez en siete pacientes argentinos.

Las intervenciones se hicieron en los últimos días en San Miguel de Tucumán, en el Centro Integral de Arritmias de esa provincia, en cinco hombres y dos mujeres de entre 50 y 70 años. Todos respondieron favorablemente.

Este novedoso marcapasos ya se utilizaba en Europa y en Estados Unidos. Una de sus ventajas, en primer lugar, es su tamaño: es un 93 % más pequeño y no tiene cables.

Este formato mini hace que sea más fácil de colocar. No se le hace ninguna incisión al paciente: sólo un pinchazo en la pierna para implantar el dispositivo a través de la vena femoral. “Pasamos los introductores, pasamos el aparatito, lo ubicamos, sacamos los introductores y se comprime el pinchazo”, explica Luis Aguinaga, director del Centro Integral de Arritmia y el cardiólogo que llevó a cabo las intervenciones.

En la colocación de un marcapasos tradicional, el paciente puede estar internado entre 24 y 48 horas. Con este, a las seis horas recibe el alta y la práctica se realiza en unos 20 minutos sin anestesia general, con una sedación leve.