El temporal afectó principalmente a Sao Sebastiao, un destino turístico ubicado a unos 200 kilómetros de la ciudad de San Pablo, ya que recibió más de 680 milímetros de lluvia en 24 horas, que es más del doble de lo esperado para todo el mes.
El pasado jueves, el gobernador del Estado, Tarcísio de Freitas, admitió que el sistema de aviso a la población por mensajes de texto no fue suficiente para evitar la tragedia, por lo que anunció la instalación de sirenas en áreas de riesgo y la construcción de viviendas para los desamparados.