El colombiano Miguel Borja, con un doblete, y Pablo Solari fueron los goleadores del último campeón del fútbol argentino que celebró la goleada con cánticos alusivos al entrenador rival, sobre todo por su pasado en Boca Juniors y por la recordada final de Copa Libertadores ganada en 2018.
River, que llegó a los 20 puntos con su 20ma. victoria consecutiva como local, le arrebató la punta a Independiente (18) que no pudo despegarse más de la zona de descenso en la tabla anual. El “Rojo”, con 46 unidades, supera por 7 a Colón (39).
A pesar del mal estado del campo de juego, como consecuencia de los conciertos del canadiense The Weeknd, el conjunto ‘millonario’ desplegó un desempeño lucido, especialmente en el segundo tiempo, para doblegar a un Independiente incapaz de rebelarse.
El club de Avellaneda, que llegó con expectativas de cortar una mala racha en el Monumental (su último triunfo fue el 3-1 en el Torneo Apertura 2009), sufrió la primera caída con Tevez como entrenador.
El despliegue de River durante la primera parte le puso un freno a las intenciones del ‘Rojo’. Con la vuelta de Rodrigo Aliendro, el mendocino Enzo Pérez ganó un socio para equilibrar el mediocampo, ante la falta del uruguayo Nicolás De La Cruz por lesión.
River dominó las acciones, se plantó en el medio y adquirió profundidad a la media hora de juego con un remate de Esequiel Barco que Rodrigo Rey mandó al córner.
Independiente sufrió los desbordes de Santiago Simón, en su regreso al equipo, y de Milton Casco, mientras que Borja intervino con criterio las pocas veces que la pelota le llegó.
El “Rojo” contó con dos situaciones aisladas, la única vía posible ante la supremacía adversaria. Un cabezazo de Giménez que pasó cerca del palo derecho y un tiro libre ejecutado por Federico Mancuello.
River se movía en bloque para el ataque a través del panorama de Manuel Lanzini y la movilidad de Barco, punzante en cada avance.
A falta de 10 minutos, Borja dio aviso con un disparo fuerte que pegó en el palo y poco después, oportunista y habilitado, aprovechó el rebote, tras el remate de media distancia de Paulo Díaz que dio en el caño.
River terminó con solidez el primer tiempo, compacto, sin fallas en sus líneas y tampoco sin exigencias, porque Independiente, que había apostado por la rapidez de Lucas González y Braian Martínez por las bandas, sólo dependió de lo que pudieran hacer Alexis Canelo y Giménez.
La confianza de River se mantuvo inalterable en el inicio del segundo tiempo. Enzo Pérez, uno de sus jugadores más destacados, continuó en buen nivel, auxiliado por Aliendro, y fue el termómetro del equipo.
La segunda conquista del “Millonario” comenzó con una brillante jugada individual de Simón, quien se sacó una marca de encima y lanzó el centro preciso para la definición soberbia de Borja. El colombiano anotó su sexto tanto en la Copa y el número 23 en el club de Núñez.
El marcador estaba más acorde con la diferencia entre un equipo y otro. Y si bien Independiente respondió pronto con un remate de Giménez que dio en el palo, River prosiguió con el dominio a pesar de las salidas de Enzo Pérez y Aliendro.
Las entradas de Solari, Facundo Colidio y Gonzalo Martínez aportaron más agresividad en ataque y desacoplaron del todo a la defensa de Independiente.
La goleada se concretó con una brillante definición de Solari, quien ensayó una gambeta en el área y definió ante la salida de Rey.
La gente de River gritó el famoso “¡Ole!” con cada pase y reflejó la enorme superioridad que su equipo ejerció sobre un Independiente que terminó abatido.
En la próxima fecha, River visitará a Gimnasia La Plata e Independiente recibirá al descendido Arsenal.