A pesar de los esfuerzos del enfermero y las autoridades presentes, no se pudieron detectar signos vitales en el interno.
Siguiendo los protocolos establecidos, se procedió al cierre de la celda y se notificó de inmediato a las autoridades penitenciarias y policiales, quienes llevaron a cabo las pericias correspondientes. El juez de Instrucción 7, Miguel Mattos, inició una investigación al respecto y ordenó el traslado del cuerpo a la Morgue Judicial de Posadas para la autopsia pertinente.
Se destacó que el interno presentaba condiciones médicas preexistentes, y la autopsia concluyó que la causa de su muerte fue un aneurisma, descartando cualquier otra circunstancia relevante.
Las autoridades penitenciarias aseguraron que todos los procedimientos de emergencia fueron ejecutados de manera adecuada y oportuna.