Asimismo, se esperanzó en que las medidas que seguirá tomando y la recuperación del país le permitan alcanzar la categoría de Investment Grade, una calificación que convertiría al país en sujeto a inversiones de gran escala.
Milei habló hoy en la apertura del Foro Económico Mundial (FEM), un símil del que se realiza en Davos.
“Si bien mi primer discurso en Davos ha tomado cierta notoriedad global, no vengo hoy aquí a hablar del rumbo que ha adoptado el mundo, sino más bien vengo a contarles el rumbo que ha adoptado la Argentina desde que asumimos”, arrancó el presidente.
Milei remarcó que está “construyendo una nueva Argentina sobre tres pilares fundamentales: una macroeconomía ordenada, anclada en el equilibrio fiscal; un esfuerzo titánico para desregular toda la economía argentina”.
En ese sentido recalcó: “Estamos corrigiendo el orden macroeconómico, cueste lo que cueste” y subrayó la implementación de medidas “que sacaron al 90% de la población mundial de la pobreza”.
El jefe de Estado sostuvo que “la reducción drástica del gasto público que estamos llevando adelante lo que nos va a permitir devolverle en bajas impositivas al sector privado el producto que el Estado le robó”.
“La brújula de este cambio apunta a que la Argentina sea el país más libre del mundo”, insistió.
Dado los que consideró logros de su plan económico, el Riesgo País bajó a 1.100 puntos y confió en “seguir bajándolo” porque tarde o temprano, volveremos a ser un país emergente en la calificación crediticia”.
“Estoy fuertemente comprometido porque en algún momento de la gestión podamos llegar a ser Investment Grade”, remarcó.
La calificación de país en “Grado de Inversión” por parte de las calificadoras de riesgo crediticio permite la inversión en activos del país a los grandes flujos financieros, que por regulaciones propias evitan exponerse en naciones con mayor riesgo.
En otro orden, anunció que a partir del RIGI el país ya logró inversiones por US$ 50.000 millones.