Cerca de las 03 horas de la madrugada de este miércoles, una mujer de 37 años se presentó en la base del GIR pidiendo auxilio, con su hijo desvanecido en sus brazos. Ante tal emergencia, el Cabo Carlos Ferreyra inició las maniobras de reanimación (Heimlich) al pequeño. Gracias a su rápida intervención, se logró desobstruir las vías respiratorias del bebé, quien reaccionó inmediatamente a través del llanto.
Posteriormente, el personal de la guardia, trasladó al menor junto con su madre hasta el Hospital de Fátima. Allí, tras ser examinado por los especialistas, se determinó que el bebé se encontraba estable y fuera de peligro. Finalmente, madre e hijo pudieron regresar a su hogar.