¿Cuánto dinero menos recibieron las provincias?
La provincia de Buenos Aires dejó de percibir en marzo 208.000 millones de pesos; Córdoba, $69.711 millones; Chaco 40.400 millones y Chubut 13.867 millones de pesos, según el cálculo de Politikón. Para dimensionar lo que significan estas cifras, muchas provincias pueden pagar más de la mitad de la masa salarial de sus empleados estatales con el dinero que dejaron de percibir por la baja en la Coparticipación.
Incluso el gobernador de Chubut, Ignacio Torres, amenazó con cortar el suministro de petróleo reclamando una cifra que representaba algo menos que los 13.867 millones de pesos que dejó de percibir en marzo por la baja en IVA y Ganancias, según la estimación de Politikón.
La caída en la coparticipación obligará a los gobiernos provinciales a realizar mayores ajustes, según los especialistas. La principal y más inmediata variable de ajuste es recortar las obras públicas. Pero habrá otros impactos seguros, como los fondos que reciben los municipios. Las provincias reciben los recursos de coparticipación y los giran a su vez a sus municipios que también tienen a estos recursos como su principal caja.
Cada provincia tiene un reparto que puede variar entre el 12 y el 20 por ciento de lo que reciben de Coparticipación Nacional.
Pero además de las chequeras más flacas de los casi 1.300 municipios que hay en toda la Argentina, el otro rubro que sin dudas sufrirá un golpe fuerte es el de los salarios a los empleados estatales provinciales. “Así como el Gobierno nacional achicó el gasto por el recorte en las jubilaciones, los gobiernos provinciales lo harán con la masa salarial que es su principal rubro de gasto”, explicó Argañaraz.
Hay que tener en cuenta que a la baja en la coparticipación se suma el recorte a la obra pública y las transferencias no automáticas o discrecionales, los subsidios al transporte urbano, el FONID y otros rubros. Todos aquellos que normalmente motivan las gestiones de gobernadores en Buenos Aires y ayudan a definir sus alineamientos políticos.
El otro punto de ajuste para los gobernadores es conseguir más recursos vía más impuestos provinciales, como hizo Axel Kicillof en Buenos Aires con el Impuesto Inmobiliario.
Otras provincias, quieren imitar a Caba, Córdoba y Misiones y comenzar a cobrar Ingresos Brutos por los intereses que cobran los bancos por colocar el dinero en Leliq y Pases en el Banco Central. Los intereses por esos instrumentos, aún cuando se haya achicado el stock de Leliq (en favor de los pases, que crecieron), sigue explicando la mayor parte de la emisión del Banco Central que aún no se detuvo a cero, como quiere el Gobierno de Javier Milei.
La ciudad de Buenos Aires hizo punta con este impuesto en 2020 y a pesar de las presentaciones ante la Corte Suprema, el cobro quedó firme. Cada provincia calcula el proporcional de acuerdo a su población y/o estructura económica.