Por su parte, las empresas indican que las principales dificultades para contratar jóvenes son la falta de experiencia y habilidades blandas, con un 20% de las empresas señalando ambos factores.
A pesar de las dificultades, el 47% de las empresas reportan una baja rotación de personal joven, aunque las principales razones de renuncia son salarios insatisfactorios (18%) y la búsqueda de desarrollo profesional (11%).
El estudio subraya la necesidad urgente de crear más oportunidades de capacitación y empleo para los jóvenes, para reducir las brechas y mejorar su inserción laboral.