Evitar permanecer por tiempo prolongado bajo la exposición de los rayos del sol,
especialmente entre las 10 y 16 horas.
Aumentar el consumo de líquidos, aun cuando no se tenga sed, en el caso de
lactantes es aconsejable dar el pecho de manera recurrente.
Evitar bebidas con azúcar en exceso, infusiones calientes, con alcohol o cafeína.
Consumir frutas y verduras.
Es recomendable vestir con ropa liviana y de colores claros.
En cuanto a la correcta conservación de alimentos se debe mantener en heladera
aquellos alimentos frescos que puedan echarse a perder debido a las altas
temperaturas. En el caso que haya perdido la cadena de frio, tenga olor, color o
textura anormal deberá ser descartado inmediatamente.