El Presidente oficializó la decisión de no promulgar la ley sancionada por el Congreso, que buscaba declarar la emergencia en el sistema de salud pediátrica para atender la crítica situación de la atención infantil.
Luego de anunciar la anulación de la Ley de Financiamiento Universitario, el gobierno de Javier Milei vetó la Ley de Emergencia Pediátrica, una normativa que había sido sancionada por unanimidad en el Congreso de la Nación con el objetivo de destinar recursos urgentes para reforzar la atención en hospitales y centros de salud pediátricos de todo el país.
La iniciativa, que contó con un amplio consenso social, buscaba aumentar el financiamiento de los hospitales pediátricos, con el Garrahan como caso más notorio, y ponerle un freno al abandono de los profesionales que son empujados por los bajos salarios justificados por el duro ajuste de la gestión de Javier Milei.
La medida fue confirmada a través de su publicación en el Boletín Oficial este jueves, justo cuando se vencía el plazo para hacerlo. En la previa, el Poder Ejecutivo se había argumentado que la ley no contaba con el “sostén presupuestario necesario” y que su implementación “afectaría el equilibrio fiscal” que el Gobierno busca preservar a toda costa.
El veto se fundamentó en el artículo 84 de la Constitución Nacional, que habilita al presidente a rechazar una ley si considera que es contraria a los intereses del país o que generan un desequilibrio económico.
La Ley de Emergencia Pediátrica, impulsada por diputados de distintos bloques, había logrado un amplio consenso bipartidista y fue aprobada tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado. La iniciativa buscaba, entre otras cosas, asignar partidas especiales para la compra de insumos, equipamiento médico y para la recomposición salarial del personal de salud especializado en pediatría, un sector gravemente afectado por la crisis y el éxodo de profesionales.
El proyecto había logrado, luego de su media sanción en Diputados, su aprobación en el Senado el pasado 21 de agosto. Casi a la una de la madrugada, en el recinto se dio finalización a una jornada tan extensa como intensa, tras la aprobación del proyecto de ley por el que se declaró la emergencia sanitaria de la salud pediátrica y de las residencias nacionales en salud. Con 62 votos a favor y 8 negativos se transformó en ley la emergencia pediátrica que permite financiar al Hospital Garrahan.