Asegurada su participación en la próxima edición de la Copa Libertadores al haber ocupado el tercer puesto en la Superliga, el objetivo primario que se trazó San Lorenzo para este semestre es avanzar con paso firme en la Copa Sudamericana. Su relevancia es significativa en lo deportivo pero también en lo económico, ya que al progresar en cada etapa le representa un buen ingreso de dinero (hasta ahora percibió 550 mil dólares; si pasa a octavos sumará otros 375 mil) para equilibrar las finanzas.
Entonado por haber eliminado en la primera fase a Atlético Mineiro (1-0 con el gol de Gabriel Gudiño, el 11 de abril, de local y 0-0 el 8 de mayo en Belo Horizonte) y con el envión anímico de superar con éxito su debut en la Copa Argentina (1-0 a Racing de Córdoba) se mide en el partido de ida de la segunda fase ante Deportes Temuco. Juegan en el Pedro Bidegain, con el arbitraje del brasileño Rodolpho Toski y televisado por Fox Sports.
El primer tiempo no entregó demasiadas emociones. Un cabezazo de Nicolás Blandi, en el arranque, fue la mejor ocasión que tuvo San Lorenzo para quebrar a Deportes Temuco.
Aunque el local dominó con el juego, el equipo chileno se animó y por momentos inquietó al fondo del conjunto de Biaggio, donde Rojas cumple un buen debut y también es titular Mouche, que llegó desde Banfield.
El 0-0 no duró demasiado, porque San Lorenzo tiene a Blandi. El 9 del Ciclón se juntó con Mouche, su antiguo compañero en el Boca campeón del Apertura 2011, y la sociedad dio sus frutos a los 18 minutos.
Sin embargo, la victoria pronto se desmoronó. A los 22 minutos, Blandi pidió el cambio por un fuerte dolor en la rodilla y dos más tarde Deportes Temuco lo igualó a través de un cabezazo de Riquero.
La pesadilla todavía no había terminado. Una nueva marca perdida le permitió a Riquero marcar su segundo gol de la noche y conseguir un triunfo histórico para su equipo.
