Desde diciembre de 2015 se destruyeron 3.500 empleos industriales por mes, cifra que implica 137 mil puestos de trabajo menos a la fecha.
En base a datos oficiales de la Secretaría de Gobierno de Trabajo y Empleo sobre la dinámica sectorial, tanto como indicadores privados, el informe de la UNDAV advirtió que «desde 2016, los niveles de actividad no paran de caer y eso se ve reflejado en absolutamente todos los índices nacionales».
«Con la única excepción de 2017, en el resto de los años de esta gestión los índices de actividad van a mostrar una marcada caída. Lejos de ser un número abstracto, es la representación de una menor producción, menos empleo y una caída del consumo», añadió el texto.
La producción industrial, de acuerdo con el reporte, registra una «merma considerable» en numerosos sectores, con bajas interanuales (medidas a marzo último) del 30,2% en vehículos automotores, 27,8% en muebles y colchones, 26,8% en maquinaria y equipo, 17% en productos textiles, 12,3% en construcción y 7,7% en alimentos y bebidas.
«A pesar de la importante devaluación, el aumento de valor de la moneda extranjera tampoco fue un aliciente para ganar en competitividad industrial externa: la cantidad de empresas exportadoras en 2018 fue la menor desde el año 1994», alertó la UNDAV.