El exsuboficial de la Policía de Misiones y actual diputado electo, Ramón Amarilla, rompió el silencio tras su liberación luego de haber estado detenido varios meses, acusado de sedición por su participación en las protestas salariales de uniformados en 2024. Desde su nuevo rol legislativo, apuntó directamente al poder político y judicial de la provincia, y denunció persecución, censura mediática y falta de libertad de expresión.
En una entrevista radial, Amarilla relató parte de lo vivido durante su detención en la Unidad Penal VIII de Cerro Azul. “Infundieron miedo en todos: en colegas, docentes, personal judicial. Fue una persecución con nombre y apellido”, afirmó.

Según su relato, fue presionado, aislado y le pusieron trabas a las visitas. “Le sacaban fotos a los documentos, los mandaban al Ministerio de Gobierno. Era una orden de arriba”, denunció.
También señaló que la decisión de incursionar en política surgió en prisión, impulsado por el acompañamiento de referentes religiosos y políticos como el diputado Miguel Ángel Núñez, quien finalmente logró convencerlo.
Amarilla fue electo en las listas del Partido por la Vida y los Valores, aunque aclaró que no conocía a sus dirigentes ni mantuvo contacto durante la campaña. “Fue algo circunstancial, no tengo vínculo con ellos”, explicó.
Sobre su futuro parlamentario, adelantó que no formará parte de un bloque cerrado, pero que está dispuesto a trabajar con cualquier legislador “siempre que sea en beneficio del pueblo misionero”. Aseguró que llevará proyectos que representen no solo a los policías sino a todos los trabajadores de la provincia.
También cuestionó duramente al Instituto de Previsión Social (IPS) y la situación del sistema de salud provincial. “Todo el mundo me pide que hable del IPS. Es un desastre. ¿A dónde van nuestros aportes?”, preguntó.
Amarilla planteó una mirada crítica del sistema político y judicial: “¿Ustedes confían en la Justicia? Después de lo que me pasó, yo no. Acá no vivimos en una provincia libre. Esto es una dictadura disfrazada de democracia, algo parecido a Formosa”.
Crítica a los medios
Respecto a la libertad de prensa, apuntó contra medios afines al oficialismo. “Muchos están ensobrados. Agradezco que Canal 12 no me haya invitado porque ahí vivimos en un mundo de pajaritos, mariposas y Cataratas”, ironizó. También criticó que algunas entrevistas que le realizaron no fueron publicadas: “Si me invitan, que muestren lo que uno dice, porque me presto a todo”.
Por último, sostuvo que la política como herramienta es válida, pero que el problema son quienes la ejercen. “La política es perfecta, los que fallan son los políticos. Yo quiero representar a los trabajadores, visibilizar lo que se esconde bajo la alfombra y, si mis proyectos no se aprueban, voy a salir a decirlo de frente. Siempre fui así”.