Los legisladores misioneros que integran el bloque Innovación Federal comienzan a perfilarse como actores determinantes en la conformación de un nuevo interbloque en la Cámara de Diputados, que podría convertirse en árbitro entre los dos grandes espacios que dominarán la escena legislativa desde diciembre: La Libertad Avanza (LLA) y el peronismo.
La idea, que impulsa un grupo de dirigentes entre los que se encuentran Marcela Pagano, Oscar Zago, Gustavo Sáenz y Carlos Rovira (lider del espació político que gobierna Misiones), apunta a conformar una bancada de unos 14 diputados, capaz de garantizar el quórum en sesiones clave y negociar proyectos con peso federal.
Por Misiones, los representantes de Innovación Federal que continuarían en funciones son Alberto Arrúa, Daniel Vancsik y Yamila Ruiz, junto con el ingreso del exgobernador Oscar Herrera Ahuad, quien ocupará la tercera banca obtenida por el Frente Renovador de la Concordia en las últimas elecciones.
Según fuentes parlamentarias, el espacio misionero, alineado con el liderazgo político de Carlos Rovira, ve con buenos ojos la posibilidad de articular con los sectores de Pagano y Zago, quienes junto a legisladores salteños buscan posicionarse como un bloque de equilibrio entre la grieta nacional.
“Podemos armar un bloque de 14 diputados para impulsar una agenda federal, con temas que le sirvan a las provincias y no solo a la macroeconomía de Buenos Aires”, señaló uno de los legisladores involucrados en las conversaciones.
La estrategia, destacan, está en línea con la política de diálogo y construcción plural que viene sosteniendo el espacio renovador en el Congreso, priorizando los temas de gestión y desarrollo regional sobre los debates ideológicos que dividen a los principales bloques nacionales.
Mientras tanto, los armadores mantienen canales abiertos con diputados patagónicos y algunos radicales independientes, con la idea de ampliar el espacio y consolidar una agenda federal que aborde cuestiones productivas, energéticas y de infraestructura.
De concretarse este interbloque, Misiones no solo conservaría protagonismo en la Cámara baja, sino que reforzaría su papel como articuladora política entre Nación y provincias, con una representación activa y equilibrada frente a los dos polos de poder legislativo.