En España, el corte ha impactado en gran parte del territorio peninsular, aunque las Islas Canarias y Baleares no han sufrido interrupciones gracias a sus sistemas eléctricos independientes o aislados.
El Gobierno español ha iniciado una investigación para esclarecer las causas del incidente, con la participación de equipos técnicos de varios ministerios. Mientras tanto, la empresa estatal encargada de la red eléctrica trabaja intensamente para restablecer el suministro. También interviene el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), que no descarta la posibilidad de un ciberataque, aunque aún no hay una versión oficial confirmada.
El apagón ha provocado importantes consecuencias en los sistemas de transporte, telecomunicaciones y servicios esenciales. En Madrid, el Metro se encuentra completamente paralizado por falta de energía, y a nivel nacional la red ferroviaria operada por Adif ha suspendido servicios por caídas de tensión. Aeropuertos, semáforos y centros comerciales también se han visto seriamente afectados en las zonas impactadas.