En medio del revuelo que ha generado la serie ‘Chespirito: Sin querer queriendo’, producida por HBO Max y autorizada por los hijos de Roberto Gómez Bolaños, comenzaron a circular versiones de que Florinda Meza planeaba demandarlos.
En un comunicado publicado a través de sus redes sociales, Florinda Meza negó haber iniciado acciones legales, aunque también dejó abierta la puerta sobre lo que podría hacer en el futuro.
Pero lo que más llamó la atención fue su crítica a cómo la retratan en la serie y cómo se ha utilizado material del pasado para atacarla.
“No he interpuesto ninguna demanda. La persona que lo dijo está mal informada. No he decidido lo que haré en el futuro”.
Con estas palabras, Florinda Meza desmintió categóricamente los rumores que circulaban en algunos medios y redes sociales. Lo que sí dejó claro es su molestia por cómo se está manejando su imagen y su historia personal a raíz del lanzamiento de la bioserie.
La actriz mexicana también expresó su incomodidad con el tratamiento que se le ha dado en la serie de HBO Max.
Según explicó, más allá de que no fue consultada para participar, la producción ha contribuido a reactivar entrevistas antiguas que, sacadas de contexto, se están utilizando en su contra.
“Como consecuencia de esta serie, han buscado en los archivos y han desempolvado todas las entrevistas del pasado, que están en otro contexto, y las han utilizado en mi contra”, lamentó.
Florinda fue pareja sentimental y luego esposa de Chespirito durante más de 30 años, y si bien siempre ha sido una figura polémica dentro del legado del comediante, en esta ocasión parece estar especialmente afectada por el enfoque que la serie ha mostrado sobre su historia.
En su comunicado, Florinda aprovechó para recordar que, aunque se debe al público, su vida y su imagen no están a disposición de los medios. Insistió en que, si en algún momento tiene algo que declarar, lo hará personalmente y de manera directa:
“Aunque me debo al público, yo no soy propiedad de los medios. Mi nombre, mi imagen y mi vida, son míos. Cuando yo tenga algo que informar, lo sabrán todos, por mí”.
Con esto, la actriz también marcó distancia de las especulaciones y dejó claro que no ha autorizado a nadie a hablar por ella ni a usar su historia sin su consentimiento.