Hasta fines de 2023, el INYM tenía la facultad de establecer los precios mínimos de la materia prima de la yerba mate, fijando valores para la tonelada de hoja verde y la yerba mate canchada en secaderos. Sin embargo, con la anulación de este mecanismo, las empresas comenzaron a fijar libremente los precios, lo que generó un desequilibrio en un mercado dominado por pocos actores: alrededor de 13.000 productores y solo ocho molinos que concentran el negocio.
Como consecuencia, los productores afirman estar vendiendo la hoja verde a precios muy bajos, sin un precio mínimo regulado que proteja su rentabilidad.
Las protestas se desarrollan en San Vicente, Andresito y San José, donde los productores buscan visibilizar su reclamo. En este contexto, el ministro del Agro y la Producción, Facundo López Sartori, participa de reuniones con los trabajadores del sector en un intento por acercar soluciones.

