El Millonario fue sorprendido por el Decano en el arranque del primer tiempo. El equipo de Facundo Sava pegó primero en el Monumental. Tras una gran jugada individual de Renzo Tesuri, uno de los puntos altos de la visita, el uruguayo Franco Nicola definió en el área chica ante la salida de Franco Armani. El gol que fue un baldazo de agua fría para todo River.
Poco a poco, el local emparejó el partido con sus individualidades. El gol del empate llegó de pelota parada tras un cabezazo de González Pirez (reemplazó a Paulo Díaz, guardado para el duelo por Copa Libertadores). Enseguida, luego de una jugada made in Marcelo Gallardo por derecha, entre Fabricio Bustos y Claudio Echeverri, Borja gritó el segundo, con suspenso, a instancias del VAR.
En el segundo tiempo apareció el famoso River Plate. Presión ofensiva, despliegue físico y voracidad a la hora de atacar. Así, Marcos “Huevo” Acuña demostró por qué es un campeón del mundo y fue el principal atacante por el lateral izquierdo. Desde una gran jugada de él, llegó el tercero del Millonario, tras la pifia de Borja y el tanto de cabeza de Meza.
La hinchada de River desató su locura tras el gol, por el juego de su equipo, por el encuentro que se viene de Copa Libertadores (próximo martes, 21:30 frente a Colo Colo en Chile) y por la proximidad del Superclásico contra Boca. El cuarto de Colidio, con una definición exquisita, fue la frutilla del postre para la primera victoria de la era Gallardo en la Liga Profesional y un rendimiento que emociona en Núñez.