IMPOSITIVA | Nacionales | 04/11/2019
El índice RIPTE permite calcular en cuánto aumentarán exactamente las categorías y las cuotas del Monotributo 2020.
Valores que permiten ingresar en cada una de las categorías del sistema, se incrementarán en enero más de un 51% desde enero de 2020. El porcentaje incluye el importante que pagan cada mes los contribuyentes, integrado por componente impositivo y aportes con destino al régimen jubilatorio y a una obra social.


Teniendo en cuenta una actividad de prestación de servicios, el ingreso máximo para ingresar y permanecer será de $1.739.261 (un promedio de $144.938 mensuales). En el caso de rubro del comercio de bienes, la facturación anual será de hasta $2.608.892 ($217.408 en promedio). Los valores regirán en todo 2020.

Las variables del esquema del monotributo se actualizan una vez por año, en un porcentaje equivalente al aumento acumulado en el período anual previo por los haberes jubilatorios del sistema nacional. Las subas de las jubilaciones se definen por una fórmula que combina la variación trimestral de la inflación y de los salarios formales.

 

De las cuatro recomposiciones previstas por la ley de movilidad en este año, resultará un porcentaje final de 51,1%: 11,83% en marzo, un 10,74% en junio y un 12,22% en septiembre. La suba de diciembre, no oficializada, será de 8,74%.

 

La categoría más baja, la A, admitirá el año próximo a quienes facturen no más de $208.711 en doce meses. Las cifras serán de $313.067 y de $417.423, respectivamente, para las categorías B y C.


CATEGORÍA A: el aporte mensual total subirá a $1955,4 ($168,9 de impuestos, $745,4 de aporte jubilatorio y $1041,1 de aporte para el servicio de salud)


CATEGORÍA B: el aporte mensual subirá a $2186,5 ($325,5 de impuestos, $819,9 de aporte jubilatorio y $1041,1 para la obra social)


CATEGORÍA C: el importe del componente impositivo comienzan a diferenciarse según se trate de actividad comercial o de servicios. El total a pagar cada mes de 2020 será de casi $2500 y en el segundo, de $2457.

 

El pago con destino a la prestación de salud será en todos los casos de $1041,1 por persona beneficiaria. El aporte jubilatorio se diferencia en función del nivel de facturación: el monto se incrementa 10% en cada categoría.

 

En cuanto el valor de los alquileres: sobre los inmuebles el tope vigente para las categorías más altas, será de $313.067.


Estas cifras se ubican por segundo año consecutivo por debajo de la inflación, aunque esta vez se achicará la brecha respecto de lo ocurrido en este 2019. Las facturaciones topes se elevaron solo un 28,46% respecto de 2017, mientras que el índice de precios al consumidor había acumulado en 2018 un alza de 47,6%.

 

Es importante observar la tabla de valores que regirá desde el mes de enero porque permitirá observar el trámite de recategorización que habrá que hacer, en caso de corresponder, en ese mismo mes.