REGION | Internacionales | 12/03/2021
En medio del aceleramiento de la crisis sanitaria que vive Brasil, que este miércoles registró un nuevo récord de muertes por coronavirus, con más de dos mil víctimas fatales, el diputado Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente Jair Bolsonaro, tuvo una reacción ofensiva en redes sociales contra los periodistas de su país. “Métanse el barbijo en el culo”, exclamó.
El legislador, de 36 años, estaba ofuscado por las preguntas acerca de las imágenes en las que se lo ve con el barbijo mal colocado, por debajo de la nariz, al ser recibido por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.


El video del encuentro, que también muestra el momento en el que un funcionario israelí le pide al canciller Ernesto Araújo que se coloque un tapabocas antes saludar a su par israelí Gabi Ashkenazi, se viralizó y motivó la crítica de la prensa brasileña.

"Lamento que esa prensa mequetrefe de Brasil cubra apenas cuestiones de máscaras. ¡Ah, la máscara, está con máscara, está sin máscara! ¡Métansela en el culo, joder!", expresó Eduardo Bolsonaro tras el encuentro con Netanyahu. 

Lejos de reconocer el error, se defendió diciendo que “estábamos trabajando, llegamos a Israel con un desfase horario de cinco horas, hicimos tres escalas; hay casos en que no hay tiempo ni de ducharse, uno va directamente a las citas".

Alexandre Padilha, diputado de izquierda y exministro de Salud de Brasil, reaccionó irónicamente a los exabruptos de su colega en la Cámara señalando que "el Covid-19 no se transmite por vía anal". "Parece absurdo tener que explicarlo, pero la familia Bolsonaro nos obliga a ello", agregó Padilha.

Brasil, con más de 270.000 muertos, es el segundo país con más víctimas fatales por coronavirus, superado solo por Estados Unidos, y la pandemia se encuentra en plena fase ascendente. Ayer, el balance diario superó por primera vez las 2000 muertes en 24 horas.

Además, la crisis sanitaria se intensificó en los últimos días, con la falta de camas de terapia intensiva en casi todos los estados del país. Los más afectados por el colapso son Paraná, Santa Catarina y Rio Grande do Sul.