Los uniformados requirieron las documentaciones del rodado al conductor, las cuales se encontraban en regla y a la vez notaron que el hombre estaba en aparente estado de ebriedad.
El alcotest realizado al dueño del vehículo arrojó resultado positivo, por lo que fue detenido, el auto secuestrado y la licencia retenida. Cabe recalcar que el automovilista no sufrió lesiones, si el rodado terminó con daños materiales.
Trabajó personal de Tránsito Municipal y de la comisaría 1ra. Interviene el Juzgado de Faltas de Puerto Rico.